sábado, 30 de marzo de 2013

Humildes pa la cámara


Estos días hemos estado por Oliana y por Santa Linya, escuelas que parecen un plató de cine: fotógrafos colgados, cámaras desde varios ángulos en el suelo, cuerdas estáticas por doquier; todo para no perder detalle de los escaladores fortísimos dando pegues inhumanos…A veces tanto tinglado me hace sentir como una intrusa en medio de un rodaje, otras veces pienso que vale la pena: como cuando se inmortaliza a los máquinas tipo Sharma que dejan mudo al respetable con encadenes como la Dura dura (9b+). Ese día tuvimos la suerte de estar allí y disfrutar del espectáculo, piel de gallina mediante.

La cuestión es que, entre tanto fotógrafo profesional, me sentí cohibida al colgarme de un jumar y dar mis primeros pasos en la absoluta vertical. Si lo de jumarear cansa, ya no te digo lo de estar un buen rato colgada del arnés. Pero todo fue por una buena causa:

                                                          Si d’alguna via vull tenir fotos, és d’aquesta.
                                              Esteve Casas, después de encadenar Los Humildes pa casa (Oliana).

No tenemos una súper cámara, ni yo tengo demasiada idea, ni tampoco pude disparar desde el mejor ángulo porque no queríamos molestar a nadie (no ocupamos la vía en sí, que hubiese sido la mejor ubicación), pero son fotos hechas con cariño y con dolor inguinal. Y es que la línea lo vale, vista desde arriba es espectacular.




lunes, 18 de marzo de 2013

Habemus historiam II: si no lo veo no lo creo

Para cerrar la trilogía de posts sobre la tumultuosa relación Güllich-Siurana cuelgo aquí las fotos que Joan Chaparro hizo en 1989, en la vía mencionada en el post anterior: Queda usted detenido, del sector Can Rebotat. 

Quiero agradecer a Joan por su aportación gráfica y por dedicar su tiempo a pasar las imágenes de diapositivas a fotos. Seguro que no soy la única que, mirándolas, se siente nostálgica de un momento que nunca vivió. Pero aquí lo tenemos, inmortalizado en estas fotografías (una versión light de ese momento, pues la realidad de lo vivido es inimitable). Gracias.
  
 

viernes, 15 de marzo de 2013

Habemus historiam


Lo que empezó siendo una frase aislada en el recuerdo se ha convertido en una porción de la historia de Güllich. Internet es una herramienta extraordinaria: entre todos hemos podido reconstruir los hechos y conocer un poco más sobre las escaladas de este mito. Habemus historiam. De momento, la cosa ha quedado así:

Wolfgang Güllich estaba realizando un viaje promocional para sus patrocinadores, cosa que aborrecía pero que le ayudaba a ganarse el chucrut. Una de las actividades que hizo por aquí fue un pase de diapositivas en Barcelona, en el barrio de Gracia. Luego, se conoce que salió de marcha y le invitaron a muchas birras o alguien le dio un Colacao en mal estado (no queda claro, la información es confusa en este punto).
El caso es que al día siguiente estaba resacoso pero, siendo hombre de deber, se dirigió a Siurana a cumplir con su trabajo. Parece ser que la carretera sinuosa no le moló demasiado (y a quién no) y, fuentes poco fiables, afirman que tampoco le gustó la niña vestida de comunión y con aspecto tristón pero maligno que le pegaba sustos en las curvas.
En el sector Can Rebotat le hicieron unas fotos que salieron en la desparecida revista Extrem, presuntamente -palabra de moda- en la vía Queda usted despedido (7c+, old school del jurásico, como mínimo). Diversas fuentes (esta vez más de fiar) apuntan a que, de haber escalado con más calma y menos mareo, le hubiese gustado el estilo siuranero.

Dicho esto, ¡ya no hay excusa! (a menos que esté resacosa o vea a la niña de marras). A partir de ahora emprenderé mis escaladas en Siurana con más motivación e ilusión, en honor a San Güllich y a sus escaladas siuraneras que nunca pudieron ser.

Por el momento, seguimos entrenando la técnica por la muy querida Montserrat. Estos días hemos vuelto a los orígenes escalando de nuevo en El Vermell del Xincarró, donde unos encadenan y otros no. 
Esteve encadenando Urbanitas (8a+) en un día soleado y muy frío, temperatura Rotpunkt


lunes, 11 de marzo de 2013

Una joya de vídeo


Hoy voy a colgar aquí un vídeo que muchos de vosotros ya habéis visto. No obstante, también voy a aprovechar para comentar cuatro cosas que quizás no sabéis en relación a ello.

La primera es sobre la vía protagonista: La joia de l’Alamut, un 8b abierto en 2010 por Carles Brascó. La ruta aprovecha gran parte del recorrido de La joia de la corona (8a+) de Salva Serrano, equipada en el 94. Estas vías están en la Colonia Puig, en la zona norte de Montserrat, típico sector deportivo frecuentado las tardes de verano.

Quiero que sepáis que la vía no la he encadenado, sé que a mucha gente le da igual, porque el vídeo quiere reflejar otro aspecto de la escalada, pero no está de más decirlo. El 8a+ sí lo encadené, hace ya tiempo, pero en cuanto al 8b, en un intento serio me he caído justo después de la bifurcación con la otra vía. Ahí está el paso duro que le da el grado (la sección dura va desde el minuto 6:50 hasta el 7:10). Es una vía que me encantaría hacer, así que ¡seguiré intentándolo!

Después del día de filmación, pillé un catarro de no te menees. No sé si en el vídeo se aprecia bien, pero ese día soplaba un viento muy frío, sumándole la conjuntada camiseta de tirantes y que tuve que subir secuencialmente, esperando a que los cámaras se moviesen y repitiendo tomas. Me quedé helada. Creo que estuve colgada unas 2 horas, así que llegar a la reunión fue toda una liberación…

Otro detalle, espero que os hayáis percatado de que en la soleada entrevista se ve Montserrat al fondo. Esa vertiente, para los que no sois de aquí, es la sur (sur-este) y es la que he visto toda mi vida al salir al balcón de casa. Aunque la entrevista está hecha desde el castillo de Subirats, uno de los lugares más bonitos del Penedès.

Finalmente, estoy muy contenta por todas las alabanzas recibidas por el vídeo, pero me estoy llevando todo el mérito y no me parece adecuado (aunque mi ego está dando brincos desde entonces). Yo escogí la vía –¡creo que acerté!- y escalé, nada más; el trabajo duro: filmación, montaje y edición, lo hicieron Jon y Gerard, los chicos de Namuss Films; la idea original fue de Jaume Oliveras -el gurú dels Bous de la Salle- que, junto con Vèrtic, hicieron posible este vídeo y otros tres más de mis compañeros de equipo (próximamente en sus pantallas). Gracias a ellos, a mis abuelos y padres se les saltan las lágrimas al darle al play.

sábado, 9 de marzo de 2013

Misterios sin resolver


Hace unos días, en Siurana, me dio por probar una vía ancestral: el primer 7b de la zona (hoy recotado a 7b+), Kurt the Gandals, en Can Gan Dionís. No me avergüenza confesar que no solo no me meneé sino que no entendí nada en la sección dura. No obstante, me iluminé. Intentando los movimientos imposibles de hombros invertidos y micro regletas con pies ausentes, una frase estalló en mi cabeza como un huevo cociéndose en el microondas: “A él no le gustó demasiado Siurana”. ¿De quién había oído eso? ¿A quién se refería?

Mientras desmontaba la vía (con un pegue tuve bastante) recordé que el sujeto de la frase era Wolfgang Güllich y que, tan valiosa información, me la había proporcionado su biógrafo no oficial más aplicado –Pere- hacía ya muchos años. Así que...al Maestro no le gustó Siurana. Interesante... ¿quizás por las vías que probó?, ¿cuáles serían? me pregunté, sintiéndome aliviada al ver que Él también había tenido estos pensamientos impuros sobre la sacrosanta Siurana.

Sin palabras (bueno va, con dos: con dos cojones)
Entonces, busqué en la Biblia (léase, Wolfgang Gullich: Una vida en la vertical) y no encontré nada al respecto. La única pista que parecía acercarme al misterio fue la de sus viajes a España a principios de los 80 para visitar al fabricante de Boreal, del cual Él era distribuidor en Alemania. También busqué por Google: nada. Pues vaya. ¿Cómo coñe sabía eso Pere? Rápidamente le escribí: me explicó que él lo había oído hacía años, pero que no recordaba más, aunque sí sabía con quién lo había hablado, con otro profundo conocedor del tema, Joan (el Penedès es conocido por su cava, pero aun más por la cantidad de escaladores eruditos que lo pueblan). 
Contacté con él y al leer su respuesta me emocioné por momentos:

Si, això era l'any 1989, en un viatge al Verdon, tot fent un cafe aut lait, veiem una cara coneguda a l'altra banda del bar. Plovia i feia fred a fora. Els vidres regalimaven, i allà hi era ell. Això que s'aixeca i ve directament cap a nosaltres. Em va caure el cafè de les mans... I va i ens pregunta, vosaltres sou catalans, oi?, vaig estar a Siurana, i ves... no és el meu lloc preferit per a escalar...

¡La leyenda era cierta! Por fin tendría la excusa perfecta para no volver a Siurana. Pero al continuar, mi gozo caía en un pozo:

No,no!! és mentida!, ens va passar amb la Lynn Hill.


¡Maldita sea! No puedo decir que no quiero ir a Siurana alegando que a Lynn Hill no le gusta. No es un argumento moral convincente, necesito la Palabra del Maestro. Para empezar, ella está viva y Güllich no (y ya sabéis la fuerza de convicción que tienen los muertos), además, a ella aun no se le han descubierto milagros, mientras que a Güllich sí, como por ejemplo el de los que se ponen calcetines bajo los pies de gato y, aun perdiendo el glamour, continúan escalando tan tranquilos.

Al final, Joan se debió apiadar de mí y escribió un segundo mensaje después de releerse una antigua entrevista datada de 1985. En ella, Güllich decía que España era un buen sitio para escalar, excelente para entrenar en invierno, pero que en Francia también hacía buen tiempo y que le quedaba más cerca. C’est fini.

El misterio sigue sin resolver y por eso os lo cuento, porque estoy convencida de que existe alguien que posee la respuesta. Y yo no voy a parar hasta que lo consiga o hasta que me olvide de ello. ¿Qué estábamos diciendo?
Ayer estuve en Vèrtic, donde, a parte de ver un par de vídeos de Els Bous -que ya colgaré más adelante- pude seguir indagando sobre este curioso caso. 


Nota: No es que no me guste Siurana, al contrario, me parece preciosa. Pero me cuesta tanto que cualquier información sobre gente que veni, vidi y no vici me reconforta.