Como dijo Jack el Destripador "vayamos por partes".Primera parte: Neula a la fuga
El sábado nos despertamos, radiantes como el día, en el párquing de Montgrony. La temporada Montgronyera ha empezado y eso se notó pues La Vena se llenó rapidamente de escaladores.
Yo le había dicho al Sensei que haría pocas vías y máximo 7a ya que al día siguiente tenía la compe en Vic. El caso es que no me pude resistir y acabé montando y probando el Crápula (aun me queda...). Al final del día, mientras Esteve le daba un pegue al Crápula para desmontarlo, llegaron Lídia y Pere a quienes hacía un montón que no veíamos. De hecho, el sábado nos encontramos con un muchos compañeros que hacía meses que no coincidíamos. El caso es que, entretenidos como estábamos con las vías y los compis, y creyendo que Neula estaba tomando el sol cerca de las mochilas, no nos dimos cuenta de su fuga. No se qué le impulso esta vez a largarse, pero la cuestión es que se fue y lo pasamos muy mal buscándola. Mientras la llamábamos a grito pelado me venían imágenes horribles a la cabeza. Por suerte, al final la localizamos en los prados del Pla de Sant Pere gracias a sus aullidos lastimeros. Yo creo que buscaba a alguien...
Moraleja: Por todos es sabido que Neula quiere mucho más a los Suris que a los Tufas. Segunda parte: King LinesTras el estrés momentaneo del extravío perruno nos dirigimos, junto a los Suris -para alegría de Neula-, a Vic para ver la peli del Shawarma y ya quedarnos, de paso, para la compe del día siguiente. La sala estaba llena a rebosar y encontrar un sitio era realmente difícil. Nosotros tuvimos mucha suerte ya que íbamos acompañando a los Suris, que a parte de escalar y robarnos el amor de Neula, son Vips. Y la peli pues, está muy bien, buena realización y mejores imágenes. Me quedé a l u c i n a d a con las peazo vías y bloques que se ha bailado el majete del Shawarma. Al salir me hizo mucha ilusión encontrarme con Raquel que hacía más de un año que no veía.
Tercera parte: la CompeComo dormimos delante del pabellón donde se celebraba la compe, me levanté a eso de las ocho y media, todo un lujo para un día de competición. Llegué legañosa a las inscripciones y casi sin saludar al montón de amigos y compañeros que ya estaban allí, volví a desayunar a la autocaravana. Ojalá siempre fuera así...
Dentro del pabellón hacía un frío de cohones y muchos competidores se marcaron un partidillo de fútbol sala. Como decía Esteve: se ven más brazos que piernas. Todos al mogollón a chutar la pelota: niños de 10 años, Ramon & lolos varios, chicas andorranas y la marabunta de Terrassa entre otros. Qué peligro.
Después de las clasificatorias lo pasé genial charlando con
Birdio Suri,
Ferran y
Catx y más tarde me fui con Anabel y Núria a la Fira de Muntanya y allí me compré una chaqueta de plumas la cual no me pienso quitar ni para dormir (
verde pistacho, una monada).
La final fue apoteósica como bien narra Ferran en su blog. Ya estaba hasta los ovarios de estar allí mirando como los jodíos lo encadenaban todo. Yo les hubiese quitado todas las presas "subid ahora, a ver si podéis". ¡Son peor que las lapas!. Ahora en serio, Marco tuvo un detalle muy elegante al tirarse en el primer paso donde resbaló Ramonet. Y es que, pensándolo bien, más deportivo fue lo que hizo el venezolano que haber continuado escalando aprovechandose del fallo del compañero. Qué bonita es la amistad. Aunque yo en esos momentos solo quería que se acabase ya la compe e irme a mi casa. De todos modos, al final los dos probaron la vía y Ramonet ganó. Ganó aunque no encadenó la supersuperfinal y nos sorprendió a todos ya que, parecía que le costase algún paso (¡increible!).
Cuarta parte: diálogos con SalvaY feliz como estaba yo, me acerqué a saludar al Sensei.
M: hola! he quedat tercera i segona de la general!
S: què vas fer ahir?
M: escalar
S: què vas escalar?
M: mmmm
S:
què vas provar?!
M:
el cràpula
Entonces Salva se llevó la mano a la cabeza mientras la meneaba en señal de disconformidad para empezar a reñirme un rato (menos de lo que yo creía, jejejeje). És conya Salva!!!
Quinta parte: de vuelta a casaA las 10:30 cogía el coche para irme a casita y mientras conducía por la agradable c-17, intentando no pegármela contra alguna de sus fatídicas curvas, me sentí feliz de formar parte de una comunidad, de un grupo entre el cual me siento muy arropada. Jolín qué emotivo, hubiese llorado de no ser por que tenía calambrazos del hambre en el estomago y mis pensamientos derivaron hacía temas más mundanos llenándose de suculentos manjares mediterraneos: pizzas, patatas y cerveza.