domingo, 23 de diciembre de 2012

Un fin del mundo cualquiera

Desde principios de verano que no nos hemos movido más allá de 100 km a la redonda. Cierto, vivir aquí es un lujo para el escalador común y da pereza irse de las escuelazas que hay en “casa”. De todas formas, nos apetecía cargar la autocaravana y salir por ahí unos días antes de que se acabase el mundo. Pendientes de la meteo, hasta el último instante no hemos decidido el destino. Hemos visitado tres escuelas y –aquí me regodeo- nos hemos hinchado a escalar:

Día 1, Masriudoms: Siempre que vamos hacia el sur hacemos una paradita en este sitio. Resguardado del frío, orientación sur y, atención, la pared donde se escalada es un gran pliegue rocoso. Lo podréis observar bien desde lejos. Ese día tuvimos la fortuna de coincidir con unos escaladores encantadores que nos aprovisionaron de reseñas y nos aconsejaron a donde ir. Gràcies!

Día 2, Montanejos: Lo primero que aprendí al llegar: el agua del río Mijares baja tibia y las primeras chapas están lejos. Creo que es algo que no olvidaré fácilmente, sobre todo lo segundo. Escalamos en el sector Pilas Alcalinas y las vías nos parecieron: muy buenas, muy duras y muy alegres.

Día 3, 4, 5, 6 y 7, Chulilla: Yo no quería ir, pero Esteve se empeñó y al final me vendí por una paella. Entiendo que el amigo quisiese ir, porque una vez allí no dejó títere con cabeza. Las vías son largas, pero no demasiado físicas en general, y la piel aguanta bastante bien así que pudimos escalar mucho y muy a gusto. Es una escuela perfecta para ir a vista, modalidad que me cuesta más que la trigonometría.

Chulilla, vale la pena, de verdad. Atended, que la guía saldrá pronto.

No sé vosotros, pero mi fin del mundo fue muy desleído. Ni ovnis, ni cataclismos, ni meteoritos, ni ná: me entró una china en el ojo y se me pegó la tortilla a la paella. ¿Acaso se equivocaron los Mayas? ¿Será mañana el fin del mundo? ¿Pasado mañana? Porque digo yo que algún día será. Y cuando se acabe Todo que nos pille al menos habiendo disfrutado. Felices Fiestas.



3 comentarios:

Esteve dijo...

La verdad es que somos un poco comodones, pero cuando sales un poco de las escuelas habituales, aún te entran más ganas de salir más a menudo.

Fernando dijo...

¿No te queda mal cuerpo y la cabeza llena de remordimientos tras decirnos que te has/habéis pasado cinco días en Chulilla?

Marieta dijo...

Stif: oui oui, sobre tot tu, que vas triunfar com la coca cola....

Fernando: para nada!!! Se espera de vosotros una gran empatía. Así como yo me alegraba de los días de llúvia cuando estaba en la oficina. jejeje Felices fiestas :)