martes, 22 de diciembre de 2009

Una vez más

Tócala de nuevo Sam, la pandereta.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Capacidad de síntesis

Me ha llegado hoy el típico mail que pasea por nuestras bandejas de entrada sobre preguntas de examenes de ESO con respuestas cachondas. En este en concreto, que por cierto me ha enviado mi abuelo que es mi mejor suministrador de correos divertidos, hay una recopilación con algunos exámenes que no había visto nunca. No me he podido resistir y cuelgo aquí uno en especial, el cual me parece sublime.


Eso es capacidad de síntesis -quien la tuviese o tuviera- y lo demás son tonterías. El estudiante propietario de esa respuesta merece la matrícula de honor (o al menos yo se la daría).

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Ginseng coreano, que rima también con sano

Leo lo siguiente: "El Ginseng coreano posee efectos antidepresivos y ansiolíticos. Favorece la actividad mental, aumentando la capacidad de concentración y de memoria; posee una acción antiestrés debido a que aumenta la capacidad de adaptación del organismo a los esfuerzos físicos o psíquicos; tiene un efecto vasorregulador, normalizando la presión arterial; mejora la memoria, el estado psíquico y le permite luchar contra el envejecimiento. Es un estimulante fundamental del metabolismo y del intelecto. ¡El uso de Ginseng coreano favorece el bienestar diariamente! Y, además, es afrodisíaco".

Lo primero que me asalta a la cabeza es cómo he podido vivir hasta ahora sin consumir ese maravilloso producto, lo siguiente que pienso es ya solo en obtener la preciada panacea. Y qué fácil es conseguirlo, en el Caprabo mismo te lo venden.
El sábado por la mañana abro la primera ampolla y, como mujer precavida que soy, tomo solo la mitad del contenido ya que en algún sitio de Internet, de los cientos que he visitado, se aconsejaba empezar tomando poca cantidad para una mejor adaptación al producto. La otra mitad se la doy a Esteve que ya lo tenía convencido tras estar todo el viaje repitiéndole las bondades de la asiática planta.
Contentos y con ganas de escalar nos ponemos a ello en los sectores l'Estret y el Balcó del Segre de Alòs de Balaguer. En la primera vía me siento bien pero, ya en la segunda, comienzo a notar un temblor de piernas poco habitual para la proximidad de chapas existente. "Debe empezar a hacer efecto el mejunje ese", pienso. Esteve no nota nada, aun. Y ya en la tercera vía parezco un colibrí enloquecido: el efecto del ginseng me sobreviene de golpe y comienzo a escalar con tembleque de piernas y tarareando la tediosa canción de Antonio Molina que, sin venir a cuento, me posee (Cocinero, cocinero enciende bien la candela y prepara con esmero un arroz con habichuelas, cocinero, cocinero aprovecha la ocasión que el futuro es muy oscuro, que el futuro es muy oscuro, ayyyyyyy, trabajando en el carbón). Entonces, Esteve empieza a sufrir también la influencia de la fatídica raíz coreana. De ello me doy cuenta ipso facto porque, afortunadamente, el ginseng me vuelve sagaz, y me bastan un par de miradas asesinas para entender que la cosa no marcha bien (para información de todos, Esteve se toma de 5 a 6 cafés diarios y se queda tan pancho, jamás le ha temblado el pulso por ello). De repente, el tío se larga a la caravana para tumbarse. "El afrodisíaco" pensaréis; pues no. "Taquicardias y mala leche"; pues sí.


Aun no vislumbro cómo solo media dosis de la maldita raíz nos pudo afectar cuerpo y mente de tal manera, fueron necesarias un par de horas para recuperar un poco el “seny” y la calma suficientes para volver a escalar. Como entenderéis, ahí acaba nuestra aventura con el mata-ratas coreano ese (no deja de sorprenderme que lo vendan en el súper). Nunca mais.
Al día siguiente, parece que Esteve está desintoxicándose aun del ginseng y parte con sus manitas la chorrera de entrada de la bonita vía "L'Ordre del Fénix", la cual ha quedado un poco coja. En fin, no sé si me explico, que alguien la pruebe y ya nos dirá... El resto de días los pasamos escalando felizmente, siempre rodeados de buena compañía y sin sufrir ningún tipo de masificación -un gran logro para estas fechas-, entre Alòs de Balaguer y les Bruixes.

Esto sí, esto sí que es sano: cruasán gigante vegetal que una amiga trajo a casa la semana pasada con motivo de festejos varios.